miércoles, 23 de marzo de 2016

ÁMBAR

Derramar el ámbar por la garganta, 
mezclarnos con la espuma, confundirla
 con el mar;
el marfil semioculto, pícaro escondite
la boca;
catalizando las palabras, renegar
de los días por habitar los anhelados.

Reír, perdernos en el uso de la lógica,
buscar el fundamento que nos haga saber
dialécticos;
nuevos espacios, condiciones necesarias,
edad, distancia;
huir de los profetas de lo empírico,
tu y yo, ajenos a la circunstancia.

Besarnos, cometer un acto de herejía,
llamarte amiga;
mirarnos, retarnos, restablecer los paradigmas,
el amor romántico.





2 comentarios:

  1. Hola Carlos! Pasé para agradecer tu comentario,y me resultó muy interesante tu espacio! Nos seguiremos leyendo,porque me hago seguidora tuya!

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  2. El amor de amiga es un amor muy real. Acabo de leer el comentario que me dejaste, gracias.

    Aquí me quedo contigo yo también.

    Un abrazo,

    Noa

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